Todo mundo desea una marca exitosa y el secreto para llegar a una se puede reducir a un objetivo principal. Este objetivo va más alla del apartado visual, los servicios y productos mismos, pero de cierta manera los influye. El objetivo que debe perseguir una marca exitosa es crear una marca que conecta con su público.
Las marcas exitosas tienen un cuidado especial al apartado emocional y la percepción que el público se forma de la marca. Pues es un factor decisivo al dar preferencia a una marca al momento de elegir entre ofertas similares. Por lo que la pregunta que debemos hacernos es ¿Cómo podemos crear una marca que conecta?
Si conseguimos que nuestra marca conecte adecuadamente con el público al que nos dirigimos estamos asegurando nuestro lugar dentro de sus mentes y corazones. Esto fortalece nuestra posición en el mercado y dificulta que otras marcas nos sustituyan. Crear una conexión necesita dedidicación por lo que sí queremos conectar recomiendo enfocarnos en los siguientes puntos.
Empezar por tener nuestra marca bien definida
Para empezar si queremos crear una marca que conecta con nuestro público necesitamos definir bien nuestra marca. Construir la esencia que es la base de nuestra marca y que guiará e informará cómo deben de ser todos los elementos que estan dentro de nuestra marca.
Hay que empezar por cuestionarlos por los motivos por los que exite nuestra marca, cuales son sus aspiraciones, objetivos, creencias y demás aspectos ideologicos esenciales para tener una idea clara hacia donde queremos llegar con nuestra marca. Anteriormente hemos tocado sobre cómo empezar para definir nuestra marca por lo que si se desea profundizar en este aspecto recomiendo dar una lectura a dicha entrada.
Una vez que tengamos definido el núcleo de nuestra marca podemos empezar a construir desde este núcleo hacia afuera para asegurar la consistencia a lo largo de nuestra marca.
Tratar nuestra marca como una persona
Lo siguiente que debemos hacer es de dejar de ver nuestra marca como un elemento de nuestro negocio y empezar a tratarla más como una persona. Las marcas pueden vivir y morir facílmente por su reputación. Si queremos conectar con nuestro público necesitamos estudiar cómo nuestra marca se presenta, lo que dice y cómo es la relación con nuestro usuario.
Visualizar estos aspectos es más sencillo si personificamos a nuestra marca. Pensar en la presentación o apariencia que maneja, cuál es la voz y la forma que dice las cosas y si la relación que tiene con el público es de guía, maestro, amigo o socio es más tangible cuando tratamos nuestra marca como una persona que se esta relacionando con otras personas.
Nuestra marca debe tener una personalidad que se alinea con lo que representa y que sea adecuada para crear la relación que deseamos con el público. Al visualizar nuestra marca como una persona estamos trabajando sobre la forma que nuestra marca conecta con el público.
Tener a nuestro público en el centro de todo
Siguiendo el punto anterior nuestra marca siempre debe de poner al centro de todo a nuestro público objetivo. Si no estamos considerando a nuestro público en el centro de todas las decisiones que toma nuestra marca, difícilmente esta podrá conectar con él.
El público es un elemento que debe estar presente desde la cconcepción de una marca y por eso cada cosa que estamos haciendo, modificando o presentando debemos considerar como afectará a nuestro público. Estamos dando un beneficio o no, estamos resolviendo sus problemas o solamente le estamos dando cosas que no necesitan.
Este tipo de preguntas debemos hacerlas al momento de construir nuestra marca. Incluso centrar nuestros mensajes desde lo que el público está buscando, es una manera sencilla de iniciar a construir una conexión. Pues si directamente estas haciendo, diciendo y atendiendo lo que el público está buscando es más sencillo capturar su atención.
Cuidar nuestra relación con el público
Finalmente y siguiendo alineados al punto anterior debemos de cuidar que nuestra relación con el público se mantenga positiva. No basta con hacer cosas que los atraigan a probar nuestra marca. Debemos cuidar la experiencia durante y después de la interación con nuestra marca. Pues será hasta que el público haya completado todo el ciclo de consumo del producto que decidirá si desea o no darle confianza a la marca.
Una buena experiencia acerca lentamente al público para que conecte con la marca y de manera similar una mala experiencia aleja rápidamente al público de una marca. Cada persona varia y cada marca es distinta por lo que en algunas ocasiones se necesitan repetidas interacciones para afianzar la conexión y en otras sólo basta con una sola.
Debemos cuidar la relación en todo momento pues, como describía en el parrafo anterior, es más fácil perder la confianza del público después de una mala experiencia. Desde un producto defectuoso o decepcionante, incluso estar ante situaciones de polémica y no tomar acción concreta. Si no tenemos acciones y mecanismos para mantener y proteger nuestra relación con el público los perderemos ante la primera dificultad que ellos tengan con nuestra marca.
Una marca conectada a su público
Cabe mencionar que para crear una marca que conecta necesitamos tener dedicación sobre nuestra marca. Pues debemos de constantemente revisar, ajustar o continuar creando los esfuerzos que nos permitan mantener la buena relación con el público y la conexión que hemos creado con este.
Para terminar debemos mencionar que no hay manera de garantizar como será la conexión que las personas formen sobre nuestra marca. Las marcas solo pueden influenciar la percepción que el público tiene sobre ellas, pero es el individuo quien al final decide asiganrle valor a la marca. Al ser algo personal la consistencia en nuestra marca facilita que la intención sea consistente en cada momento y de esta manera influenciar la percepción del público de manera exitosa.
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