¿Cómo debe cambiar mi logo?

La vez pasada hablamos sobre cuándo es momento de cambiar un logo. Para darle continuidad a este tema en esta ocasión discutamos sobre qué tipo de cambio necesita mi logo cuando llega el momento de cambiarlo. Para trabajar de una manera estratégica, lo que debemos hacer es definir objetivos y metas. Debemos estudiar los motivos del cambio para determinar qué tipo de cambio se necesita realizar.

Similar a un doctor que escucha los síntomas de un paciente y revisa al paciente para determinar qué malestar corresponde a los síntomas y la evaluación, determinando de esta manera el tratamiento adecuado. El diseño presenta un desafío similar pues debemos identificar y diferenciar los síntomas de los problemas para dar una solución adecuada. 

Debemos ver el cambio de logo como un problema a resolver. Por esto es necesario entender las causas detrás del problema. Identificar efectivamente si este problema no es solamente un síntoma de un problema mayor. El sistema que usamos de manera interna para identificar el tipo de cambio es tratar de dar respuesta a las siguientes preguntas.

Primer Pregunta: ¿Por qué debe cambiar mi logo?

Primero debemos preguntarnos el motivo por el cual queremos cambiar nuestro logo.  Dependiendo del caso los motivos varían. Quizás tengamos un mal diseño, quizás nuestra imagen es anticuada. Los motivos varían según el caso pero conociendo el motivo podemos enfocar mejor el proceso para resolver el problema. 

Esta pregunta es una gran oportunidad para identificar si el cambio de logo es la raíz del problema, pues si el motivo de cambio no esta ligada a la función de identificación de un logo, por ejemplo querer vender mas, entonces el logo solamente es un síntoma de un problema distinto.

En la entrada anterior hablamos en profundidad sobre los principales momentos que indican que es momento de cambiar un logo y que van más alla de tener un diseño malo. Por lo que es un buen punto de partida para quien se pregunta si es necesario cambiar su logo cuando su diseño no es malo.  

Segunda Pregunta: ¿Buscamos una evolución o una revolución al cambiar de logo?

La siguiente pregunta es determinar cómo debe cambiar el logo. Para términos generales podemos dividir el cambio en dos grandes opciones. Buscamos una evolución del logo en su estado actual o bien, es momento de otro cambio y revolucionar por completo el diseño del logo. 

La evolución es básicamente tomar lo existente y pulirlo para mejorar su implementación. Estamos tomando lo que existe y solo eliminamos imperfecciones detectadas en el presente. Queremos preservar el legado y la historia de la imagen, cambiar sin distanciarnos de la imagen y la identificación que ya esta asociada actualmente. 

Si la evolución es refinar la rueda una revolución implica reinventar la rueda. En la revolución buscamos distanciarnos de lo establecido y presentar visualmente un cambio notable. Una revolución de imagen va ligado a un cambio mayor, usualmente cuando se ha transformado la marca ya sea por una situación social o por el enfoque a un mercado nuevo.

Tercer pregunta: ¿Cómo debe evolucionar mi logo?

Si vamos a evolucionar el diseño debemos identificar los aspectos que son esenciales. Queremos una evolución por que hay una deficiencia en el diseño, esta deficiencia afecta la implementación. Pero como no queremos alterar la identificación previamente establecida debemos preservar la esencia del diseño actual.

Buscamos preservar el legado y la historia del diseño,  debemos determinar qué elementos son indispensables para este la preservación y que elementos son necesarios cambiar para evolucionar la image. Encontrar el balance adecuado entre estos dos aspectos es la clave principal de un logo que evoluciona con éxito.

Tercer pregunta: ¿Cómo debemos revolucionar el logo?

Si vamos a revolucionar la imagen debemos definir hacia dónde va el cambio, que es lo que esta asociado con nuestra imagen actual que deseamos descartar y como deseamos que el nuevo logo sea asociado. Estos dos elementos serán la guía que nos orientarán al momento de pensar el nuevo rumbo de la imagen.

También preguntarnos hasta que extensión llegaremos con esta revolución de imagen. Buscamos cambiar solo el logo, queremos cambiar el nombre, deseamos cambiar el diseño del símbolo sin cambiar el tema o icono que hay establecido. Este tipo de cuestiones son las que deseamos explorar para definir nuestras exploración y sus límites, así como evitar que vayamos más alla de lo aplicable o deseado. 

La revolución puede estar ligada a un proceso de desarrollo o cambio de marca por lo que en estos casos es importante definir adecuadamente la marca antes de querer cambiar el logo. Pues la marca abarca muchos más elementos de los que un logo toca y por lo mismo la marca es la prioridad de la estrategia de diseño en un proceso mas extenso.

¿Por qué es importante?

Si bien esta no es la única manera para determinar el cambio en un logotipo, usar este sistema tiene sus ventajas, la primera de estas ventajas es que nos permite tener una estructura al proceso de diseño.  Segundo este proceso permite mantener una comunicación con el cliente sin necesidad de utilizar lenguaje demasiado técnico, facilitando la comunicación y retroalimentación.

Al tener una comunicación efectiva tanto el cliente como el diseñador pueden trabajar en conjunto enfocados en un mismo objetivo. Por lo mismo usar lenguaje altamente técnico o especializado solamente consigue es un obstáculo en la comunicación efectiva.

Finalmente un proceso como este nos permite definir objetivos, objetivos a los cuales podemos referirnos al momento de estar en una etapa de retroalimentación en el proceso de diseño. De esta manera disminuir el riesgo de querer forzar alteraciones o cambios arbitrarios que no son dictados por los objetivos determinados previamente con el uso de estas preguntas.